Una de las noticias que más me han impactado de la socialización primaria es la realizada por el Licenciado Javier Durán en la que nos comenta lo importante que es la socialización primaria para que la secundaria se pueda llevar correctamente. Nos comenta que esta etapa (primaria) es exclusividad de los padres pues es aquella en la que el niño empieza a vestirse, compartir alimentos, obedecer a los mayores… Si el niño se ha comportado correctamente y sus padres le han enseñado los pasos a seguir y sabe lo que está bien y lo que está mal ese niño podrá tener, por lo general, un socialización secundaria estupenda; pero si, por el contrario, el niño no ha tenido una buena socialización primaria en la etapa primaria los maestros o compañeros deberán destinar mucho tiempo puliendo y civilizando a quien debería ya, estar listo para mayores aprendizajes. Por eso, para criticar el trabajo del docente, el padre de familia debe tener el valor suficiente como para darse cuenta si como padre ha realizado su trabajo, de no haberlo hecho, deberá unirse y apoyar al maestro para que pueda hacer su trabajo con libertad.
La socialización primaria se caracteriza por ser la decisiva por la plasticidad, sensibilidad y dependencia en que se encuentra el niño y por la adhesión emocional a los “Otros significantes”, aceptando sus roles y actitudes, internalizándolos y apropiándoselos (identificación). Esta concluye cuando el concept del “Otro Generalizado”.
En cambio, la socialización secundaria se caracteriza porque puede prescindir de la identificación de carga emocional y debe tratar con un yo formado con anterioridad en la primaria y con un mundo ya internalizado.
En conclusión, me gustaría decir que la socialización primaria es la más importante.
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